I. REGALOS DE DIOS
Seguramente desde que nos hemos levantado hoy por la mañana,
Dios nos ha dado regalos que podemos apreciar y agradecer. Ello nos ayuda a ser
felices, permanecer alegres y a olvidar aquello que nos preocupa. San Pío de
Pietrelcina decía "reza, ten fe y no te preocupes". Reflexiona: los
que le vivimos pidiendo a Dios distintas cosas o que resuelva problemas, hoy
podemos con ayuda del Espíritu Santo dedicar el día a hacer un momento de
oración para agradecer a Jesús que por su bondad tenemos la dicha de poder entrar
un día con Él en el cielo y disfrutar de la santidad que nos participa en el
ahora.
Podemos empezar diciéndole: Gracias Señor por el don de la
vida, gracias por el maravilloso día, gracias por la oración, gracias por la
bondad que has puesto en mi, gracias porque acordándome de Ti sé que te
acuerdas de mí, gracias por tu fidelidad que inspira la mía, y podemos ir
concretizando el agradecimiento en lo personal. ¡Qué lindo es esto y cómo le
debe gustar a Nuestro Señor que lo hagamos!
Envió: Marcelo waldemar Mildner
II: REFLEXIÓN: “¡Envíame Señor tu Espíritu! Cuando se
hayan agotado mis humanos recursos, Y necesite tu Sabiduría para progresar,
Cuando con la indiferencia mate a mi hermano, Y necesite tu impulso para
aprender a amar. Cuando el orgullo ahogue mi alma, Cuando no pueda mantener la
calma, Envíame Señor tu Espíritu. Que él descienda en mi Señor, Para que sepa
comprender este milagro de la vida, Para que con bondad encare mis acciones, Y
con amabilidad exprese mis ideas. Para que humildemente pueda gustar tu
Presencia, sencillamente pueda hacer realidad Tu enseñanza, y pueda adorarte
con eterna alabanza.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario